En Carelmapu, Maullín, región de Los Lagos se recolecta una gran cantidad de piures. Muchos pescadores y empresas relegan la tarea de desconchar estos mariscos a mujeres que realizan esta tarea cerca de sus casas. Las conchas suelen ser dejadas en la calle lo que ha generado suciedad y mal olor sobre todo en el verano. Si bien hay personas que se hacen cargo de retirar las conchas de la calle, el costo es muy elevado considerando la ganancia que obtienen de desconchar los piures.
A raíz de esta situación, una organización indígena de la zona, a la que pertenecen muchas de las desconchadoras, con apoyo de la Universidad de Los Lagos, comenzó a investigar el beneficio de estos residuos para la tierra. Así nace la idea de postular a un FPA (Fondo de Protección Ambiental) para desarrollar un espacio donde se pueda realizar compostaje y vender esta tierra para que sirva de abono.
Este fondo fue adjudicado y actualmente se está trabajando para iniciar con el proyecto. En esta etapa se involucra SERVICIO PAÍS, que es parte del desarrollo técnico del proyecto y trabaja colaborativamente con la comunidad para que se lleve a cabo en óptimas condiciones.